Sábado 6 de Diciembre:
Amanecimos tempranito partiendo de la hora a la que nos habíamos acostado, a las 10:30, desayuno, puesta a punto y rumbo al Royal Botanic Garden, el jardín botánico vamos. Cogimos autobus y allí estuvimos hasta las 3 de la tarde, muy bonito el lugar, es una auténtica pasada, enorme y con cientos de ardillas supergraciosas, ya mostraré las fotos. Seguramente por otras fechas será más bonito de ver por el hecho que las plantas estarán en flor y con ello más colorido, aun así el toque de la nieve sobre el césped, mítico y mágico.
Volvimos a coger el autobús para volver a casa y ya tarde noche de conversaciones, compritas, cenita, en plan tranqui, tuvo bien la cosa.
Con el frío que hacía rumbo a casa no demasiado tarde, momento triste, momento feliz y al sobre.
Domingo 7 de Diciembre:
Me he despertado sobre las 8, porque me puse la alarma...ordené la habita, me duché, conver al teléfono y a dar una vueltita por las calles y mercaditos del centro, con esto de la Navidad está todo superlindo, es una delicia caminar por las calles, porque vas disfrutando de cada detalle.
Luego cogímos el 22 para ir a Ocean Terminal, allí está amarrado el Britania, no sé si se escribe con dos enes, bueno no importa, yate, por no llamarlo Titanic, que formó parte de la Reina de Inglaterra durante 40 años, no he llegado a entrar porque valía 10 pounds y estaban a punto de cerrar, volveré en otra ocasión sino en esta estancia en una futura.
Al barquito se accede desde el un centro comercial, el más grande de Edimburgo, terriblemente enorme, qué gigante, las vistas una maravilla, podíamos decir que estábamos donde se acaba la ciudad, porque allá donde mirabas no veías más que agua de mar, esas olas que respiro yo...
Vuelta al centro de nuevo con el 22 y visita rapidita a la National Gallery, Nn hay demasiado que ver algún cuadro de Botticelli y Raphael así más conocidos y poco más, en una horita lo vi todo, como no entiendo de historia del arte, es lo que tiene, que empleo poco tiempo en echarle un vistazo.
Por último para terminar el día visita al MONTEITHS, un bar muy monín, con decoración y calefacción extremadamente relajante, buena música, hot chocolate y conversación, qué más se puede pedir?
Finde completito, lo estoy pasando bien, disfrutando de los rincones y las vistas que ofrece está pequeña pero en el fondo gran ciudad.
Hasta mañana lunes y lo digo concienciada, mañana escribiré mi "diario" a diario.
Cuídense y abríguense para proteger sus gargantas...
Canción del día Ángel by NACH
Amanecimos tempranito partiendo de la hora a la que nos habíamos acostado, a las 10:30, desayuno, puesta a punto y rumbo al Royal Botanic Garden, el jardín botánico vamos. Cogimos autobus y allí estuvimos hasta las 3 de la tarde, muy bonito el lugar, es una auténtica pasada, enorme y con cientos de ardillas supergraciosas, ya mostraré las fotos. Seguramente por otras fechas será más bonito de ver por el hecho que las plantas estarán en flor y con ello más colorido, aun así el toque de la nieve sobre el césped, mítico y mágico.
Volvimos a coger el autobús para volver a casa y ya tarde noche de conversaciones, compritas, cenita, en plan tranqui, tuvo bien la cosa.
Con el frío que hacía rumbo a casa no demasiado tarde, momento triste, momento feliz y al sobre.
Domingo 7 de Diciembre:
Me he despertado sobre las 8, porque me puse la alarma...ordené la habita, me duché, conver al teléfono y a dar una vueltita por las calles y mercaditos del centro, con esto de la Navidad está todo superlindo, es una delicia caminar por las calles, porque vas disfrutando de cada detalle.
Luego cogímos el 22 para ir a Ocean Terminal, allí está amarrado el Britania, no sé si se escribe con dos enes, bueno no importa, yate, por no llamarlo Titanic, que formó parte de la Reina de Inglaterra durante 40 años, no he llegado a entrar porque valía 10 pounds y estaban a punto de cerrar, volveré en otra ocasión sino en esta estancia en una futura.
Al barquito se accede desde el un centro comercial, el más grande de Edimburgo, terriblemente enorme, qué gigante, las vistas una maravilla, podíamos decir que estábamos donde se acaba la ciudad, porque allá donde mirabas no veías más que agua de mar, esas olas que respiro yo...
Vuelta al centro de nuevo con el 22 y visita rapidita a la National Gallery, Nn hay demasiado que ver algún cuadro de Botticelli y Raphael así más conocidos y poco más, en una horita lo vi todo, como no entiendo de historia del arte, es lo que tiene, que empleo poco tiempo en echarle un vistazo.
Por último para terminar el día visita al MONTEITHS, un bar muy monín, con decoración y calefacción extremadamente relajante, buena música, hot chocolate y conversación, qué más se puede pedir?
Finde completito, lo estoy pasando bien, disfrutando de los rincones y las vistas que ofrece está pequeña pero en el fondo gran ciudad.
Hasta mañana lunes y lo digo concienciada, mañana escribiré mi "diario" a diario.
Cuídense y abríguense para proteger sus gargantas...
Canción del día Ángel by NACH
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